El 20 de este mes, cumplí 5 meses desde que fui madre, por primera vez...y a la fecha, ya han ocurrido varios eventos distintivos de este fenómeno de ser madre.
- Converso en la calle con gente, con la que nunca hubiera conversado antes, si no fuera por que soy madre.
- Si antes me gustaba que repararan en algo propio, esto se ha vuelto un grito exacervado de "miren a mi bebé y lo hermoso y simpático que es".
- Definitivamente el mío es el más lindo.
- Igual me pego hablando de mi hijo, aunque juré no hacerlo.
Aparte de esto, también me han pasado otras cosas "asociadas" de las que no me siento tan orgullosa, como por ejemplo, el cansancio nocturno, la falta de interés en las cosas de mi pareja, (cosas que antes nos trasladaban a una conversación cualquiera), la falta de preocupación por mi casa y por hacer feliz a mi pareja.
Y al final toco el tema, (total este blog es mío y es mi oportunidad de desahogarme), la falta de comunicación con él...
Es extraño como cambian los amores, ahora ya no me importa tanto su aceptación como antes y por eso, discuto, alego, peleo, pataleo y critico a destajo. Curiosamente, tengo muy claro que mi hijo no lo reemplaza, pero igual la balanza se me descalibra cada ciertas lunas.
Me pregunto si será un proceso pasajero debido a la extrema dependencia que mi hijo tiene conmigo, o si será que una deja de honrar tanto a la pareja cuando nacen los hijos y si será normal que ahora ande más eléctrica con él. ¿Será sintomático de profundos rencores?, ¿será pasajero?, ¿será peor con el tiempo?, ¿nos amarán igual que antes o nos van dejando de querer cuando transitamos por este canal de la maternidad? o para ellos, al igual que para nosotras, ver el brillo de los ojos de tu hijo o la risa espontánea ¿será suficiente para relegar las pasiones por un rato o hasta que la muerte nos separe?
En fin, ya han pasado 5 meses desde que fui madre por primera vez y como me dijo alguien una vez "cada día una los ama más" y porlo menos para mí, es así y ese "los", también lo incluye a "él".
